por Daniel Campos
Las fiestas de cumpleaños son una de las costumbres más fuertemente arraigadas en nuestra sociedad. Como cristianos convertidos que tenemos el testimonio de Jesús (Apocalipsis 19.10) y guardamos los Mandamientos de Dios, deberíamos saber cómo comportarnos ante este tipo de celebraciones.
Son bien conocidos para un miembro de la Iglesia de Dios los orígenes paganos de la Navidad, Semana Santa, la Pascua de Resurrección, la adoración en Domingo y otras fiestas, pero ¿conocemos realmente qué hay detrás de los cumpleaños?
El calendario que usamos secularmente es de origen gentil y está basado en el tiempo que tarda la tierra en girar alrededor del sol, por lo tanto este calendario recibe el nombre de "solar". El calendario que el Eterno le dio Israel está determinado por los meses lunares, puesto que doce meses lunares no coinciden con un giro de la tierra al sol, la misma fecha cae en diferentes momentos cada año. Este impedimento ya es prueba suficiente que el Eterno NO QUIERE que celebremos los cumpleaños.
La vida comienza en la concepción, cuando somos engendrados, no en nuestro nacimiento.
Si buscamos en la Escrituras, encontramos el relato de dos cumpleaños. Uno de ellos se encuentra en Génesis 40.20, el otro en Mateo 14.6 y Marcos 6.21. Ambas celebraciones terminaron con personas muertas, el panadero en un caso y Juan el Bautista en el otro.
La celebración de los cumpleaños viene de la adoración pagana, la cual se nos ha ordenado no hacer. El historiador judío Flavio Josefo se refiere a cómo Tito celebró el cumpleaños de su hermano y padre, realizando una matanza de judíos cautivos. Cuando Herodes Antipas celebró su cumpleaños, él estaba siguiendo una costumbre helénica, ya que no hay evidencias de celebraciones de cumpleaños en Israel.
Pero investiguemos un poco más el por qué de estas fiestas. La "Biblia satánica" de Antón Szandor La Vey (versión en inglés) de Avon Books, 1.969 dice, en el capítulo 11, bajo el título "Días Religiosos", pág. 96: "El más alto de todos los días sagrados a observar en la religión satánica es el día del propio cumpleaños. Esto está en abierta contradicción con los días sagrados de las otras religiones, que deidifican a un dios particular que fue creado en forma humana de su propia imagen, mostrando que tienen un gran ego escondido."
"¿Por qué no ser honesto y, si vas a crear un dios a tu imagen, porque no creer que ese dios eres tú mismo? Todo hombre es un dios si elige reconocerse a sí mismo como un dios. Por lo tanto, los satanístas celebran su cumpleaños como el más importante día sagrado del año."
Una forma popular de saludar al que cumple años es decir "Hapy birthday". Aún en América Latina, en algunos países se tiene la costumbre de cantar la tradicional canción del cumpleaños en castellano y luego en inglés. En el antiguo Egipto el nombre del dios del Nilo era Hapi, identificado con el dios Osiris (esto hunde sus raíces en Nimrod), la unión de estos nombres fue conocida en la antigua Grecia como Serapis o Sarapis, que luego se conoció como el dios Júpiter, también conocido como Zeus. Cuando se dice "Hapy birthday" o "feliz cumpleaños" se hace una invocación para que este dios le traiga a la persona que cumple años suerte y buena fortuna.
La realidad es que el cumpleaños tiene un profundo sentido religioso y de adoración a demonios, como otras celebraciones de este mundo "cristiano". El cristianismo tradicional no adora al Eterno, sus invocaciones son a Zeus, a Júpiter, a Astarte y a tantos otros ídolos que son honrados por este mundo liderado por Satanás.
El "Diccionario de folclore, mitología y leyenda" de Funk y Wagnalls nos da la siguiente información: "Entre la gente con un buen sentido del tiempo, los cumpleaños marcan la transición entre un estado de ser y otro. Debido a que cualquier cambio es peligroso, los cumpleaños son tiempos cuando buenos y malos espíritus tienen la oportunidad de atacar a los celebrantes que en ese momento están en peligro.
La presencia de amigos y la expresión de buenos deseos ayudan a proteger al celebrante contra cualquier peligro desconocido. Las ceremonias y los juegos en los cumpleaños frecuentemente son un símbolo de dejar lo pasado y empezar algo nuevo.
Cuando los niños americanos soplan en sus cumpleaños las velas de las tortas con un soplido, están ansiosos de demostrar su hazaña, pero el deseo secreto que hicieron será concedido solamente si todas las velas pueden ser apagadas de una. La prueba de fortaleza y habilidad en el cumpleaños demuestra su progreso
"
El diccionario continúa: "La entrega de regalos y comer juntos
potencia los vínculos de todos y esto está asociado con congraciarse con buenas y malas hadas o duendes, diosas madres y parientes ricos, en sus propios cumpleaños."
Para quienes siguen estas prácticas, el día, hora, y lugar del nacimiento puede ser el indicio de buena o mala fortuna como lo determinen complejos cálculos de astrólogos, numerologístas y los que practican la geomancia.
Voy a citar ahora el libro de Bárbara Rinkoff llamado "Prácticas de cumpleaños alrededor del mundo" de Barrows y cía, N.Y. 1.967 de párrafos sueltos de las Pág. 3 a la 9 (versión en inglés). Dice: "Los cumpleaños comenzaron hace mucho, mucho tiempo, en Europa. La gente creía en los buenos y malos espíritus en esos días.
Ellos pensaban que los espíritus se juntaban especialmente alrededor de una persona que celebraba su cumpleaños. Todos estaban atemorizados de esos espíritus que podían causar daño al que celebraba su cumpleaños, así que él era rodeado de amigos y parientes que con sus buenos deseos y su verdadera presencia, lo protegían contra peligros desconocidos que el cumpleaños podría traer." Respecto a la costumbre de dar regalos dice: "
Dar regalos, junto a los buenos deseos, daban aún más protección. Comer juntos ayudaba a proveer una mayor seguridad y ayuda para conseguir las bendiciones de los buenos espíritus y la diosa madre
Por lo tanto, la fiesta de cumpleaños, con sus regalos y congratulaciones era, originalmente, con la intención de dar a la persona seguridad de la maldad y bendiciones para el año que comienza. En los días tempranos, solamente reyes y hombres prominentes eran suficientemente importantes para celebrar sus cumpleaños. Pero con el tiempo la gente común empezó a celebrarlos y eventualmente todos los niños empezaron a celebrarlos."
¿Qué nos informa este libro sobre las velas de los cumpleaños? "Aún el más pequeño de los niños sabe que las velas son para pedir deseos. Pero, ¿por qué? La razón se remonta a los antiguos griegos y romanos que pensaban que las velas tenían cualidades mágicas. Ellos ofrecían oraciones y hacían deseos para conseguir beneficios de los dioses de las llamas de las velas. Los dioses entonces enviarían su bendición y quizás responderían a sus oraciones. Los germanos fueron también los primeros en usar las velas directamente sobre las tortas de cumpleaños. El que celebraba el cumpleaños hacía un deseo secreto en la llama, igual que hace la mayoría de los niños americanos hoy, y ese deseo será concedido si todas las velas son sopladas de un solo intento."
Conociendo esta información deberíamos preguntarnos ¿a quién se aplaude luego de soplar "las velitas"? ¿Se aplaude al Altísimo? ¿Se honra al Creador con esta práctica? La respuesta es obvia. Continúa el texto: "Jugar juegos en los cumpleaños comenzó hace mucho tiempo como un símbolo de dejar atrás el año que pasó y empezar el nuevo año. Juegos de habilidad y fuerza eran jugados y esos juegos eran considerados como pruebas para mostrar cuanto progreso el cumpleañero había hecho desde el año pasado. Todos estaban orgullosos cuando él demostraba cuán fuerte y más sabio se había convertido y cuánto había aprendido desde la última celebración.
Dar palmadas de cumpleaños (manteadas) significan desear suerte para el próximo año. Esta costumbre se ha perdido desde hace mucho pero todavía es bien conocida en algunos países. Toma varias formas: hay golpes, besos, pellizcos, choques (otra costumbre es tirar al cumpleañero por el aire, y luego agarrarlo entre varios), pero TODOS son para LA BUENA FORTUNA. Si su niño se queja de sus amigos por seguir esta vieja costumbre, Ud. puede explicarle que realmente le están deseando bien para el próximo año. Muchas supersticiones están conectadas con los cumpleaños. Los astrólogos, numerologístas y los que practican geomancia todavía usan el día, hora y el lugar de nacimiento como señales para la buena o mala suerte y son firmes creyentes que hay días de buena y mala suerte para nacer. En algunos lugares, las tortas de cumpleaños son todavía usadas para decir el futuro. Un timbre, un botón, un anillo y numerosos objetos pequeños de este tipo son escondidos antes que la torta esté totalmente preparada. La fortuna es predicha de acuerdo al objeto que le ha tocado."
Rápidamente podemos identificar como una práctica abominable a los ojos del Creador la búsqueda del conocimiento del futuro a través del horóscopo, pero ¿en qué se diferencia el uso del horóscopo de la práctica de adivinar el futuro a través de los pequeños objetos que se colocan muchas tortas de cumpleaños (especialmente en las damas de 15 años) y de casamientos? La verdad es que en el fondo de estas costumbres (y hay más) que parecen tan inocentes, hunden sus raíces en las profundidades del paganismo. La adoración y el servicio a los dioses que se honran en los cumpleaños son abominación al Eterno. ¡Dios odia estas celebraciones! (Deuteronomio 12. 31-32).
Podemos ver en la Biblia que registrar el nacimiento de uno y contar los años de edad fue practicado por hombres fieles al verdadero Dios. Noé fue un hombre justo.
Encontramos los años de Noé registrados en la Biblia (Génesis 7.6). También encontramos registrados los años que vivió Abraham (Génesis 25.7) y sabemos que él estará en el Reino. Podemos ver entonces, en estas Escrituras y otras, que no hay nada malo en recordar o reconocer el nacimiento de uno y medir en años cuánto se ha vivido. Pero respecto a celebrar los cumpleaños e intercambiar regalos para dicha ocasión, no hay referencia en la Escritura a ningún siervo de Dios que lo haya hecho.
De hecho, hay registros claros que muestran que los israelitas consideraban la celebración de los cumpleaños como adoración pagana e idolátrica. No hay evidencia de celebración de cumpleaños en Israel antes del período helénico. No hay evidencia de celebración de cumpleaños de Cristo, ni de ninguno de los apóstoles ni sus seguidores. De hecho, Flavio Josefo, en su libro "Contra Apion", libro 2, sección 26 escribe: "La Ley (Torá) no nos permite hacer festivales en los cumpleaños de nuestros niños."
Con respecto a los primeros cristianos el historiador Augusto Neander escribió: "la noción de la fiesta de cumpleaños era ajena a las ideas del período" (La Historia de la religión Cristiana y la Iglesia, durante los tres primeros siglos, traducido por H. J.
Rose, 1.848, p.190). Orígenes (un escritor del tercer siglo E.C.)
insiste que entre toda la gente santa en las Escrituras, de ninguno se registra haber hecho una fiesta o un gran banquete en su cumpleaños. Solamente pecadores (como Faraón y Herodes) hicieron grandes fiestas en el día que habían nacido." (Enciclopedia Católica, 1.913, Vol. X, p.709, versión en inglés).
Los judíos "consideraban las celebraciones de cumpleaños como parte de adoración idolátrica
" (Cyclopdia de Strong, 1.882, Vol. I, p.817, versión en inglés).
El Diccionario Bíblico de Unger, pág. 147, (inglés), nos brinda la siguiente información: "Cumpleaños:
La costumbre de observar cumpleaños es muy antigua y grandemente extendida.
En Persia se celebraba con particular honor y con banquetes, y en Egipto el cumpleaños de Faraón era observado con gran pompa. No hay referencias en las Escrituras de celebraciones de cumpleaños por los propios judíos
Los remotos judíos consideraban la celebración de cumpleaños como parte de la adoración idolátrica
"
Sí es ACEPTABLE a los ojos del Eterno recordar un nacimiento y recordar y reconocer cuántos años una persona ha vivido.
No es ACEPTABLE a los ojos del Eterno: Realizar y participar de una festividad por un cumpleaños ya que estos están de acuerdo a los rituales y costumbres de la adoración gentil y por lo tanto idolátrica.
¿O qué acuerdo tiene el templo de Dios con los ídolos? Porque nosotros somos el templo del Dios vivo, como Dios dijo: Habitaré en ellos, y andaré entre ellos y seré su Dios, y ellos serán mi pueblo. Por tanto, salid de en medio de ellos y apartaos, dice el Eterno; y no toquéis lo inmundo y yo os recibiré. Y yo seré para vosotros padre, y vosotros seréis para mis hijos e hijas, dice el Eterno, el Todopoderoso" (2 Corintios 6. 16-18).
|